Nombre: Stacey Beaman
Qué quería ser de mayor: la COO de Calvin Klein. No sabe de dónde venía esa idea, supone que del hecho de querer vender algo glamuroso y que le encantara.
Ocupación: instructora de fitness y empresaria
Una frase: «Courage doesn’t always roar. Sometimes, courage is the little voice at the end of the day that says ‘I’ll try again tomorrow'»
El día que iba a conocer a Stacey era un sábado de noviembre. Una mañana en la que el objetivo era seguirla sin más, sin saber que iba a hacer ejercicio de una forma que jamás había hecho. Durante estos años había pasado por el Taebo, la Batuka, el Zumba o el Body Combat por un lado; por el running, el fútbol, el spinning, o la musculación a secas por el otro. Pero no por esa combinación de movimientos pliométricos (Plyometrics) combinados con baile (Jamming) y saltos que me iban a dejar exhausta y satisfecha a partes iguales. Si es que en California saben hacer cosas buenas. Stacey y yo nos volvemos a encontrar. Ha venido de California a pasar unos días y me ha cedido unos momentos de su tiempo.
La gente que es conocida tiende a serlo solo por una cosa, o por una actividad profesional. Pero siempre, detrás de cada persona hay una historia. ¿Qué es lo que hizo a la Stacey de hoy?
Antes de ser la cofundadora de mi empresa fui profesora de educación primaria durante nueve años. Esto realmente me preparó para tener una empresa en muchos aspectos. Primero, me hizo flexible y capaz de hacer muchas cosas a la vez, porque cuando estás en una clase de 36 estudiantes, necesitas tener las cosas organizadas y listas para trabajar. Además, esto me hizo acostumbrarme a estar en público hasta el punto de encontrarlo cómodo, ser entusiasta y tener un punto de showman, cuando eres profesora necesitas tener a tu audiencia enganchada. Y eso es similar cuando estás dirigiendo tu empresa: cuando estás formando a los instructores, dando instrucciones, dando una clase individual…
También, cuando eres profesora lidias con el bien más preciado de la gente, que son sus hijos. De modo que lidié con muchos padres que estaban molestos, padres que consideraban muchas cosas injustas… Así que esto me enseño a ser muy, muy diplomática, tener mucha paciencia, mantener la calma… Ya sabes, esto te prepara para cuando estás dirigiendo tu empresa y los clientes se molestan, o las cosas van mal. Todo eso ayudó.
Me gusta esto. Normalmente cuando empezamos con un negocio nos dicen que tenemos que ser valientes, líderes, tener visión… pero de la paciencia en los negocios a mí no me han hablado mucho.
¡Oh, Esther, la paciencia es probablemente la primera cosa que necesitas! He tenido constantes pruebas y tribulaciones para las que he necesitado tener mucha paciencia. Cosas que no funcionan, desarrollas tu producto y no sale bien. La tecnología no funciona. Esperas a que la gente te responda… la paciencia es un factor enorme, y puede ser muy, muy difícil mantener la paciencia porque estás lidiando con el dinero. Y el dinero es la cosa con la que digamos que sobrevivimos, y eso puede ser un estrés. La paciencia es clave.
Entonces te diste cuenta de que tenías que cambiar de vida… ¿Cuándo?
Sobre el séptimo año de mi trabajo como profesora de educación primaria. Tuve este sentimiento bien, bien profundo dentro de mí de que necesitaba hacer algo más, algo más grande, algo más creativo, algo que tocara más personas. Tengo mucho respeto a la educación y a los profesores, no es que piense que ese trabajo no es importante, pero algo me decía que yo tenía algo más para dar. Pero honestamente, en ese momento no estaba segura de qué iba a ser.
«¡La paciencia es probablemente la primera cosa que necesitas!»
Como estaba algo perdida y no segura de lo que quería hacer, tuve este gusanillo de viajar. Entonces decidí viajar; en ese tiempo no tenía a nadie que viajara conmigo, muchos de mis amigos tenían familias, carreras, o no tenían dinero… entonces oí de un programa de voluntariado en España que fue el inicio de mi transición. Me tomé un año de excedencia en la enseñanza, me pasé seis meses viajando, y sentí que volver a ser profesora no era algo que quería hacer. Ahí es cuando conocí a mi pareja y comenzamos a desarrollar la empresa.
Dicen que los inicios son duros, pero hablemos de los hechos. ¿Cómo fue tu struggle?
Empezar es tan difícil primero porque llevas muchos sombreros. Lo típico es que cuando empiezas un negocio no tienes dinero para contratar a la gente suficiente para cumplir con todos los roles, así que normalmente te ves cubriendo todos los roles. Eres el diseñador web, el diseñador, el de Recursos Humanos, el financiero, el que hace los presupuestos… Hay tanto que aprender, tantos malabares, muchas puertas que se te cierran. Y no es la única dificultad. Yo tuve que alquilar mi casa y volver a la casa de mis padres. Hice muchos sacrificios porque quería que prosperara la empresa y no quería involucrarme en una gran deuda mientras ésta crecía. Me mudé a casa de mis padres a los 37 años. Nada fácil, pero valió la pena para construir la empresa.
Me imagino que en esa época te dirían de todo…
Sí, oyes tantos consejos, y tan diferentes, que no estás segura de qué cosa necesitas hacer primero. ¿Necesitas Relaciones Públicas primero? ¿Necesitas prensa primero? ¿Necesitas primero crear una página web potente? ¿Necesitas probar tu producto primero? ¿Qué va primero? Y estás intentando saber la respuesta con probablemente muy poca cantidad de dinero, que quieres gastar de la manera más inteligente posible, y créeme, a lo largo del camino cometerás tantos errores… leí tantos libros sobre negocios, escuché tantos podcasts, y todos decían que el éxito está fundamentado en la pila de tus fracasos. Y eso es tan cierto… Llevamos cuatro años en el mercado ahora. Y diría que los errores han sido en cantidad más que los aciertos, pero así es como aprendes. Vas a cometer errores en el camino, es algo que has de asumir y hacerte a ello.
«Empezar es tan difícil primero porque llevas muchos sombreros.»
Pero claro, el éxito llega, por supuesto. Para algunos llega poco a poco; para otros, de repente. ¿Cómo lidias emocionalmente con el éxito, la envidia y la negatividad?
La evolución de mi éxito y de mi empresa ha sido interesante en mis amistades. Algunos de mis amigos se han quedado conmigo, y la gente de mi entorno ha sido mi ánimo, un apoyo, alegres por mí y felices de verme conseguir mis objetivos y felices de escucharme contarles las historias de la gente que conocía… pero no voy a mentir, hay un puñado de gente en mi vida que pensaba que seríamos amigos para siempre y se fueron. Es como que quizá sintieron que mi vida entera era mi empresa y se sintieron como que no encajaban en mi vida. O quizá pensaban que se me había subido a la cabeza, no sé. Pero tiende a pasar, las amistades y las relaciones cambian cuando empiezas a elevarte y cuando en tu vida hay algo que te llena. Por otro lado, conocí gente muy interesante que vino a mi vida en estos últimos cuatro años, que encarnaban la mentalidad que tenía, que es apoyo absoluto, felicidad y empoderamiento.
Menos mal…
Creo que he hablado mucho sobre el lado duro de los negocios. Hay tantas cosas positivas y tantas maravillas, definitivamente. Cuando presentas un producto y a la gente le gusta, cambia las vidas de la gente, eso reconforta tanto… es increíble. ahora estamos escuchando tanto feedback positivo de nuestros productos, y eso es algo muy gratificante para nosotros.
¿Qué querrías que te preguntara la gente?
No sé qué querría que me preguntara la gente, supongo que lo que quieran. Creo que no sabes lo que necesitas hasta que estás en el negocio. Creo que es importante escuchar a otros emprendedores y hacerles preguntas. Y sí, es difícil, a veces estás pagándolo todo con la tarjeta de crédito porque no tienes dinero. Lo que recomiendo es estar en clubes de networking. Estar en contacto con otros emprendedores para no estar aislado.