Estos días miro mucho atrás y recuerdo una de las grandes crisis que he vivido, la del 2008. Hace mucho tiempo; pero recuerdo estar muy pendiente por aquello de “esto va a marcar un antes y un después” y yo quería ser plenamente consciente de todo. Por aquel entonces me había escapado por los pelos, me acababan de hacer un contrato indefinido después de estar de 6 meses de prueba y ya dejaba lejos aquello de ser un becario precario.
Empezábamos a escuchar expresiones extrañas, “vivir por encima de nuestras posibilidades”, “desaceleración económica”, “brotes verdes”… Y nos metieron de lleno en un lenguaje de expertos económicos: deuda, bolsa, prima de riesgo, y muchos otros que ni recuerdo ni entenderé. De golpe, sin darnos cuenta, nos metimos de lleno en clases de economía cada vez que poníamos la TV. No solo economía, también de gestión de empresas: reestructuración de la plantilla, fusiones, trabajo parcial, despidos, darse de baja en la Seg. Social…
Todos repetíamos aquello de “espero que esto sirva para que en un futuro hagamos las cosas diferentes”; pero a la que pasaron un par de años, vimos cómo todo volvía a las mismas. La economía no sé si volvió a ir bien; pero sí, volví a ver Porches Cayenne por la calle, volví a ver cómo subían los precios de los inmuebles y volví a ver la misma dinámica de tratar de sacar dinero de forma fácil (¿algún excomprador de Bitcoins por aquí?).
En resumen: No aprendimos nada.
Claro, ahora, con la que tenemos encima, volvemos a oír lo mismo: “a ver si esto hace que hagamos las cosas distintas en el futuro”.
No importa. ¿sabes el motivo? Porque el futuro ya está aquí. Son las acciones del presente las que importan.
LO QUE HACEMOS AHORA ES LO QUE TENDREMOS EN EL FUTURO
1, No se trata de lo que pasará después de una crisis, si no de cómo reaccionamos ahora. Eso es lo que define el futuro. Piénsalo, ya tienes ese futuro delante, no hace falta una bola de cristal. ¿Cómo afrontamos la crisis económica en aquella ocasión? Con recortes y foco en lo económico. El objetivo era priorizar la economía por encima de cualquier cosa. ¿Qué se hizo? Primero, echar a gente, reducir sueldos (o contratar a la baja), más funciones con los mismos sueldos y priorizar un sistema bancario e inmobiliario antes que cualquier otra cosa. Eso ha definido los siguientes años: subida del alquiler, sueldos precarios, gente con 50 años compartiendo piso, recortes en sanidad, recortes en educación… No entro en si había o no otra opción, es lo que se hizo y eso es lo que “creó” el futuro siguiente.
2, Tú ya sabes cómo va a ser el futuro próximo, lo estás creando. Ese futuro que estás tratando de averiguar y predecir, no hace falta que lo hagas. Ya está aquí. Ya estás en él. ¿Qué hemos hecho? Poner fe en la ciencia y en concreto en la salud. Dependemos de la sanidad y vamos a dar mucho por ella. Bueno, es que lo estamos haciendo: literalmente, la sanidad es la única que nos puede sacar de nuestras pequeñas prisiones caseras. No solo eso, valoramos cada tarde con aplausos el esfuerzo de los que se dedican al cuidado y la salud. En el futuro, tendremos un sistema sanitario con mucha más importancia (no digo mejor, pero será más importante de lo que ha sido). De hecho, ahora recibimos clases de epidemiología cada vez que ponemos la TV…
3, La humanidad vuelve a estar en el centro de la ecuación. Evidentemente no es tan bonito y tiene un efecto tan hippie; pero volvamos a las decisiones que se han tomado: en lugar de priorizar a la economía, se ha parado todo y se ha tratado de priorizar a las personas. De mejor o peor forma, ojo; pero se está poniendo foco en ello. Primero la gente. No quiero meterme en política, por tomar perspectiva, miremos a otros lugares. Italia, por ejemplo. Una de las primeras cosas que decidió el gobierno transalpino fue abrir la fuente de miles de millones de euros para dar protección a trabajadores, familias y empresas. No recuerdo ese tipo de acciones en la crisis anterior.
4, La importancia del grupo, el futuro pasa por hacer cosas en común. Es otro hecho actual que será lo que se mantendrá en los próximos años. Si salimos de esto pronto es porque todos hemos hecho un esfuerzo por el bien común. Por el bien de todos. Se trata de una enfermedad en la que estamos todos en el ajo, esto es un virus que afecta a todos por igual y las muestras de solidaridad son mucho más frecuentes ahora que en aquel entonces. Hoy (y mañana) hay personas que conocen más a sus vecinos. Algunos han girado completamente su relación y los que se odiaban, y denunciaban, ahora son super amigos (true story). Aunque sea algo fake, un pasito a una relación más cordial con el prójimo.
5, No hay cambios de golpe, siempre son progresivos. Sentido común, eh. En el presente podemos ver cómo será el futuro; pero también vemos cómo es el pasado. Una dicotomía que está en constante lucha. Las predicciones que digo son parte de lo “nuevo”; pero hay muestras de lo viejo. El egoísmo por mencionar un ejemplo, si no, lo del papel de water no hubiera pasado…
No es cómo será el futuro, es cómo es ya el presente. El cambio sucede día a día. En el arte de hacer predicciones, que no nos engañen, no hay trucos. Tus hechos actuales ya muestran tu futuro.