No solo para primavera, estación en la que el personal se anima a vestir con colores más cálidos y se atreve con determinadas combinaciones prohibidas en invierno. La moda africana comienza a darse a conocer, sobre todo cuando se presenta en manos de quienes realmente la producen. «Es una moda que actualmente no está muy vista y que no es muy valorada», explica Teresa Noreah, diseñadora de ropa, bolsos y complementos afro. «Entonces mi objetivo es poder hacer llegar a otras persona la moda afro. Principalmente quiero fomentar la moda africana».
El objetivo no es que la moda africana siga siendo vista como algo excéntrico a vestir solo en entornos informales y desenfadados: «Es otro punto de vista de ver la moda». Inspirada en los colores, sobre todo, en los que se ven muy poco y llaman la atención, pero no por ello dejan de ser chic.
«Lo africano lo puedes combinar con cualquier cosa e ir igualmente chic. El colorido no tiene que ir en contra de una buena combinación de colores.»
¿Y los hombres? Los primeros. «Me sorprende ver que los hombres se están atreviendo a llevar los colores de la moda afro, y no solo africanos, sino españoles, de Estados Unidos… más incluso que las mujeres». Teresa reflexiona sobre las decisiones de los hombres a la hora de hacerse con una cartera colorida, por ejemplo. Y en ello encuentra un argumento más: «Mis diseños son para gente chic. Mi público es seguro de sí mismo, que marca la diferencia y que asume que puede influir en los demás. Incluso algunos influencers me han contactado».
Todo esto, posible con telas, máquina de coser y mucho empeño. «Todas mis prendas están hechas a mano, con mucho mimo y empeño».