La concentración en el trabajo es esencial para lograr una eficiente productividad. Pero ya hay suficientes distracciones: los compañeros, el teléfono, internet, el calor, la falta de sueño y las preocupaciones de la vida cotidiana. Al final es como nadar a contracorriente.
Dicen que una de las mayores preocupaciones de los jefes es el bajo rendimiento de los empleados. Cierto que para las personas honestas, mucho tiempo que debería usarse en el trabajo se va en el ordenador que no funciona, la contraseña que caduca, la búsqueda de archivos y otros menesteres. Es normal que el cerebro tienda al pequeño chute de dopamina de una red social… y ahí se quede. Si se observara el tiempo neto de productividad, se aceptarían las propuestas de reducir las semanas laborales a cuatro días.
Sin embargo, por aburrido que se haga el trabajo, no hay excusas. Si quieres lograr que tu desempeño aumente y evitar futuros llamados de atención de tus superiores, entonces este es el artículo que debes leer.
Antes de comenzar, es importante que sepas que no todas las personas tienen la misma capacidad de concentración. Algunas lo logran con facilidad, mientras que a otras se les dificulta un poco más. A pesar de ello, puedes lograr un nivel satisfactorio.
Conocerse
Conocer en qué momentos de tu día cuentas con mayor concentración te será útil para organizar tus tareas y tu rutina. Generalmente, al comienzo de la jornada es cuando tenemos mayor enfoque y luego va disminuyendo; sin embargo, como aclaré anteriormente, no todas las personas somos iguales. Intenta descubrir cuál es el momento del día con mayor rendimiento para ti.
Definir objetivos del día
Cuando comiences tu jornada laboral, enfócate en enumerar los objetivos que quieres cumplir ese día. De esta forma podrás concentrarte con mayor facilidad, ya que perseguirás una meta ysabrás por qué realizas cada acción.
Realizar descansos
A partir de tener definida una rutina y tus objetivos diarios, también podrás organizar los descansos. Se recomienda tomar pequeños descansos cada hora, en los que podrás ir al baño, hidratarte, responder mensajes o desconectar por unos minutos de tus tareas.
Aquí deberás ser cauteloso. Que un pequeño descanso no te desenfoque de tus actividades, ni tampoco dure demasiado.
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Eliminar las distracciones
Aquí no hablamos de las distracciones tecnológicas como el móvil, las redes sociales o Internet. También sobre aquellos compañeros charlatanes que forman parte de los motivos por los que la concentración suele esfumarse.
Por tales motivos, es necesario que sepas poner un límite a esos motivos que llevan a distraerte. Apaga el móvil, no entres a páginas de Internet que no sean importantes para la tarea que realizas y ,si es necesario, cuelga un cartel de «no molestar» o tan solo avísales a tus compañeros que precisas máxima concentración por un determinado tiempo, con el fin de que no interrumpan tu labor.
Tener un entorno adecuado
Previo a comenzar a trabajar, es conveniente que tengas tu escritorio organizado, con todos los elementos necesarios. De esta manera, evitarás tener que levantarte y distraerte.
Además, si tu lugar de trabajo se caracteriza por ser ruidoso, recomiendo que utilices auriculares o cierres bien tu oficina para evitar sonidos molestos.
Cuidado personal
Por último, adquirir hábitos saludables ayudarán a mejorar tu atención. Uno de ellos es dormir lo necesario. Que alcances la concentración óptima para desempeñar tus tareas se te hará cuesta arriba si no has dormido bien la noche anterior. El sueño y cansancio harán que tus párpados sean como rocas.
La alimentación es otro aspecto a tener en consideración. Estar nutrido te ayudará a lograr mayor rendimiento. Es decir, ¿quién es capaz de concentrarse si está hambriento? Por el contrario, comer demasiado te traerá sueño.
Algunos alimentos que pueden ayudarte son la cafeína y el azúcar. Obviamente, en cantidades pequeñas, ya que todo exceso es perjudicial.
A pesar del calor y el aburrimiento, es posible mantener la productividad. Y como ves, se trata de hábitos simples.
(Ahora bien, cuando se trata de Burnout, estos hábitos necesitan algo más. Pulsa para leer Cómo combatir el burnout cuando las vacaciones están lejos o no puedes cambiar de trabajo )