Las personas altamente sensibles disfrutan de ambientes tranquilos, captan y experimentan más intensamente las emociones. Sus características particulares le llevan a percibir que no fluyen tan bien como otros y, en especial, en entornos altamente competitivos ¿Te identificas? Sí es así, este artículo es para ti.
¿Qué caracteriza a las personas altamente sensibles?
Son personas altamente sensibles un 20% y 30% de la población. Sumamente perceptivas, captan y reaccionan con mayor intensidad a los estímulos. Grandes observadores y receptores sensoriales, lo que los lleva a pensar de forma analítica y profunda.
Experimentan fuerte emocionalidad y son muy empáticos e intuitivos. Se comprometen con las tareas, son perfeccionistas y autoexigentes. Tienden a ser introvertidos, aprecian la belleza y tienen una baja tolerancia a la falta de orden.
¿Reconoces estas características en ti? Sin duda te agregan valor. No obstante, algunos ambientes pueden ser desafiantes por tu esencia y lo que valoras.
¿Qué valoran las personas altamente sensibles?
Las personas altamente sensibles valoran un buen ambiente laboral. Aprecian que se reconozca su individualidad y se les acepte. Adoran la tranquilidad, un ambiente sin ruidos y distractores.
Prefieren trabajar concentradamente sin tantas premuras, presiones y estrés continuo. No fluyen bien en trabajos con mucha confrontación, rutinarios y monótonos con mucho control del tiempo.
Lo que valoran no se da en la mayor parte de los trabajos. Y si se tienen objetivos de crecimiento profesional y económico hay trabajos buenos para lograrlo, pero son altamente competitivos.
¿Cómo son los entornos laborales altamente competitivos?
Son entornos con objetivos muy ambiciosos y tiempos específicos. Se aprecia a las personas tenaces y extrovertidas, con capacidad para reprimir emociones y resistir presión. El resultado lo es todo, y su consecución exige sacrificios.
Frecuentemente se olvida el equilibrio de vida personal y laboral. Las relaciones pueden ser ásperas por exigencia de horarios extendidos y ejecución de multitareas.
El enfoque en la tarea es tan alto que la sensibilidad no parece tener cabida. Esto puede afectar e ir minando motivación y bienestar. ¿Estás en un ambiente altamente competitivo?
¿Qué puedes hacer?
Ante todo, sentirte bien contigo mismo porque tienes un conjunto de fortalezas interesantes y podrás aportar mucho. A veces la pregunta no es ¿por qué estoy aquí? sino ¿para qué estoy aquí?
Dejé mi trabajo sin absolutamente ningún plan B. ¿Es una buena idea?
En un entorno altamente competitivo aprenderás mucho del mundo profesional, de las personas y de ti mismo. Algunas decisiones pueden facilitarte la experiencia, entre otras:
Trabaja la aceptación
La naturaleza del negocio y los estilos de dirección generan estos ambientes. Acepta los hechos y concéntrate, únicamente, en lo que puedes controlar: tus emociones y cómo respondes a los grandes desafíos.
Da sentido y significado a lo que haces
Examina lo que haces y te darás cuenta de que beneficia a personas o a una causa, directa o indirectamente. Esto te permitirá encontrar motivación extra, seguir enfocado y hacer las cosas bien. No para competir con nadie, sino para vencerte y ser la mejor versión de ti mismo.
Trabaja en forma colaborativa
Esto tal vez implique encontrar un tiempo extra, pero si aportas tu conocimiento y experiencia a otros creará acercamiento y entendimiento. Busca tender puentes para sentirte más a gusto.
Personaliza tu espacio
Busca trabajar con buena iluminación y ventilación, utilizar audífonos, si es posible. Rodéate de algún objeto preciado o escrito, que te transmita serenidad y confianza en ti mismo o en lo que sea tu fe.
Haz pausas para oxigenarte
En la medida de lo posible toma pequeños descansos. Eso te ayudará a equilibrarte.
Meditación y actividad física
Te ayudará a liberar tensiones, restaurar equilibrio y generará bienestar. Será más efectivo en ambientes en contacto con la naturaleza y en donde puedas contemplar belleza.
Prepara tu salida
Invierte tiempo para contactar contigo mismo y descubrir qué te gustaría hacer y cuáles opciones son realistas. Recuerda explorar tus intereses, si te vuelves experto en un área te abrirás camino.
Sobrevivirás y estarás bien ¡depende de ti!
Ser personas altamente sensibles implica desarrollar autocontrol y actuar de forma inteligente y estratégica. Si estás en un entorno altamente competitivo lograrás sobrevivir, mientras cambias de rumbo a un entorno más en armonía con lo que eres y quieres ser. ¡Ánimo!