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Cómo recibir (sin broncas) el feedback de tu jefe

Retroalimentación en la empresa. La verdad es que suena mejor en inglés: feedback. Si embargo, lo verdaderamente importante en los recursos humanos de una organización es tener información continua y productiva entre trabajadores y jefes, sobre los valores y la misión del negocio.

El feedback nos sirve para trabajar de forma coordinada, para identificar las áreas de mejora y para establecer y reforzar políticas y objetivos comunes de la empresa.

Todos debemos estar abiertos a recibir sugerencias para mejorar nuestra labor y nuestra eficiencia, pero también debemos considerar que un buen responsable de área o líder debe conseguir un ambiente propicio para realizarlo: no es válido en cualquier momento ni es válido fuera de tiempo. La forma y su canalización deben ser estudiadas con rigor y precisión para que surtan el efecto deseado o buscado:

No debe realizarse en el momento de la crisis, sino cuando se ha superado la brecha del conflicto, pero siempre con agilidad o rapidez…dentro de un mes no tendrá ningún beneficio y sólo se verá como una “reprimenda”, muy poco útil.
Resulta más efectivo, cuanto más realista se formule, y siempre buscando las palabras adecuadas que motiven y no incidan en el plano emocional o personal del trabajador a quien se retroalimenta.
Incidiendo en el lenguaje y enlazado con la superación del momento de crisis: No  resulta oportuno tratar las cuestiones como problemas sino como oportunidad de mejora y crecimiento.

En este escenario, y desde nuestro punto de vista, como trabajadores, igualmente debemos ser capaces de aceptar el feedback de nuestros jefes o responsables sin involucrar nuestro espacio personal, sin entrar en valoraciones o calificativos decepcionantes o agresivos… De nada nos va a servir enfadarnos con quien sólo intenta mejorar la calidad del servicio o trasladarnos la opinión sobre nuestros resultados.

Desde mi ángulo y experiencia, te dedico unas sugerencias que, en mi día a día, intento llevar a la práctica, y que creo pueden ayudar a mejorar en el entorno laboral:

La escucha activa: Ya he hablado anteriormente de ella; y es válida y necesaria, tanto en la vida personal y familiar como en la laboral. Intenta no interrumpir y participa en los pasos que te van sugiriendo.
Evita una actitud defensiva: No estás en esa reunión para debatir, no es el momento. La autojustificación no suele llevarse bien con la aceptación de los intentos de mejora de habilidades que se transmiten en una retroalimentación.
Pide ejemplos: Toma notas si lo ves oportuno y lo que no comprendas, solicita clarificación o pautas para la mejora.
Procésalo con naturalidad: Más que la ejecución, es importante tener claros los conceptos…cuando lo trabajes, serás tú el que fomente y solicite el feedback antes de que sea requerido por los mandos.

Lo principal es estar abierto a otros puntos de vista. Y en este punto, la frase “cuatro ojos ven más que dos” es absolutamente cierta: la visión desde el punto de vista del cliente difiere siempre de la del prestador de servicios; la óptica de la mujer y del hombre, desde el punto de vista absolutamente biológico, son diferentes y complementarias; las expectativas del trabajador y del líder de la organización pueden perseguir un mismo objetivo, pero desde perspectivas diferentes.

Pero también tendrás que prever que, en ocasiones, vas a recibir una crítica, y ésta es más difícil cuando realmente crees que la otra persona está equivocada. Hay que estar preparado para recibir un feedback negativo de los jefes, y tal vez debas discrepar de su opinión, para lo que deberás razonar por qué tu criterio difiere del suyo y buscando el lenguaje adecuado para ello. Si la persona que es tu superior no escucha —y también habrá que saber con quién trabajas y cómo es su carácter y habilidades en este campo— te resultará necesario recordar que trabajas para ellos y que las desavenencias a veces hay que aceptarlas. Y seguir adelante.

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Abogada por vocación, asturiana de nacimiento y convicción. Soy amante de la música y de la gastronomía, principalmente de la francesa y de toda su cultura, literatura y, en general, su Joie de vivre. Conectar personas y profesionales, y buscar soluciones ágiles a retos diarios, forman parte de mi agenda y mis pasiones.

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