Cuando hablamos de Apple, lo mejor es dejar las cosas claras y empiezo este artículo posicionándome: soy fan de Apple; pero me mantengo abierto a la crítica.
De todos modos, no escribo este artículo para hablar bien o mal de la marca de Cupertino (siempre quise decir eso, y más cuando suena como un episodio de Black Mirror); escribo para reflexionar sobre las posibles razones de negocio que hay detrás de la Keynote 2018.
¿Qué paso? Bueno, hay miles de artículos en otros medios que lo cuentan mejor que yo; tampoco es la intención de Dévé, así que para ponerlo rápido:
- Nuevas versiones de iPhone X (Xr, Xs, XsMax)
- Nuevo Apple Watch series 4
- HomePod en español
- Actualización de software
Y ya. ¿Y dónde está aquí la revolución? Sí, lo sé. Si luego además te digo que desaparecen versiones anteriores al iPhone 7, que jubilan el iPhone X y el SE; que no hay novedades en cuanto iPads, ni MacBooks, tampoco sobre ese cargador-alfombrilla anunciado el año anterior, que te olvides de los jacks y sus adaptadores y, además de todo eso, que se finiquitan los descuentos al reemplazo de las baterías ¿cómo te quedas?
Pues uno se desmotiva. Ya no son tan revolucionarios, ¿no?
Bueno, no nos precipitemos. ¿Por qué habrán hecho eso? En muchas escuelas de negocio nos enseñan teorías y modelos de estrategia empresarial que podrían justificar algunos de los movimientos de Apple; pero me interesa una reflexión más evidente, la del sentido común.
Hagamos un ejercicio: imagina que un día te levantas y te has convertido en el CEO de Apple.
Goloso, eh. En tus manos está una de las empresas más potentes del planeta, con uno de los mejores brand equity, buenos ingresos y márgenes, y además, una cantidad exagerada de clientes fieles que son capaces de dejar de comer para tener tu último producto.
Pero no quiero que te sitúes ahora, imagínate que estás en el 2017 y tienes todo un año por delante, ¿qué cosas podrías hacer? A mí se me ocurren 5.
1. Toma de decisión
Primeras decisiones después de asumir el cargo. Nervios. ¿Le metes mucha mano a la empresa? La sabiduría popular siempre ha dicho que, lo que funciona, mejor no tocarlo. Bueno, como CEO miras la información disponible, y parece que la empresa va bastante bien.
Seguramente tienes presión por cambiar cosas así que vas a lo fácil: decidir qué es lo que seguro no haces. Los MacBook se ha mejorado mucho hace poco, no los tocamos; y los iPads parecido, dejémoslos estar por ahora.
2. Más consumidores
Tu empresa tiene un dominio importante tanto en el mercado de ordenadores como el de móviles y tablets. Pero se te valorará por si la empresa vende o no vende, así que es importante mantener la entrada de nuevos consumidores para que la compañía siga creciendo. ¿Y de dónde los sacas?
Mientras el departamento de innovación no te propone nada, ¿qué producto actual puede atraer nuevos clientes? ¡El Apple Watch! Las ventas van bien; aunque parece que no acaba de conquistar ese target nuevo, solo los Apple Lovers.
Así que piensas en nichos de mercado, ¿y si voy a por esos consumidores preocupados por la salud y fitness que ahora compran productos como Fitbit? Como quieres centrar bien el tiro, decides apostar sólo en salud, eso siempre vende. Pues propones hacer lo que Apple ha hecho mucho, si algo parece que tiene filón, a tope con ello.
Decides buscar algún partner que te de ese plus como puede ser la Asociación Americana del Corazón y potencias un nuevo Apple Watch para que, cuando detecte patrones anormales fisiológicos, llame a emergencias. Te entusiasma, tiene futuro. Ya puedes ver a miles de seniors abriendo tu producto estas navidades.
3. “Plan renove” de tus consumidores actuales
Sentido común: ves que tu producto estrella, el iPhone, se vende bien; pues mejor no tocarlo y seguir vendiéndolo, ¿no?
Claro, pero ves que las ventas no van tan rápido como antes, se está saturando el mercado y, o bien muchos de los clientes potenciales ya tienen un iPhone; o se van a marcas muy prometedoras como Xiaomi… Te ves en la obligación de renovar tu portfolio y lanzar nuevos iPhone.
Lo malo es que no hay mucha iniciativa desde innovación, no te proponen grandes cosas (¿dónde estás Steve?); así que tienes que optar por lo fácil: mejorar lo que ya hay con una pátina de novedad. Y los datos te lo ratifican, tus clientes aman tanto a la marca que han renovado el iPhone a pesar de subir considerablemente el precio… Lo ves claro, lanzarás tres nuevos, el Xr, el Xs y el XsMax.
Además de los nuevos modelos, y para evitar canibalización, será mejor reducir la oferta, así que retirarás el iPhoneX y el SE (éxitos en ventas), que dará la sensación de obsolescencia a los clientes y forzará un poco a renovar sus teléfonos.
4. Imagen de marca
Esto de gestionar Apple es complicado, hay mucha presión. No es sólo la “fabrica”, también es la marca. Ahora mismo Apple tiene un brand equity muy potente que debes mantener a cualquier precio y tienes la exigencia cada año de presentar una revolución.
La dinámica no te deja otra: harás el “update” habitual del software, y le darás bombo a los tres teléfonos «nuevos» (además del Apple Watch series 4, claro). Al menos estarás presentando novedades.
Eso sí, intentarás controlar la comunicación y en la Keynote del 2018 solo dirás lo positivo y dejarás de lado aquello de la alfombrilla de carga inalámbrica o la desaparición de los iPhone X y SE. Bien.
5. Reducir ineficiencias y costes
Ya que estás a tope tomando decisiones, miras más en detalle las consecuencias de retirar modelos antiguos y todo son ventajas. La primera es que puedes aprovechar para quitarte de encima cosas que siempre han molestado en producción: el puerto de audio jack.
La segunda ventaja es que ese cambio te quita la necesidad de añadir gratis los adaptadores jack-lighting y forzará a los consumidores a usar (y comprar) el nuevo sistema inalámbrico de audio. Y si por lo que fuera, el consumidor quiere usar los auriculares tradicionales, tendrá el adaptador a partir de 10€ en la tienda oficial.
Finalmente, la mejor ventaja de retirar modelos antiguos, la tercera: si decides eliminar esos modelos, darás carpetazo a la subida excesiva de los costes cuando se decidió dar la oportunidad de reemplazar las baterías con pérdida de capacidad.
Después de esto pregunto yo, ¿qué opinión tienes ahora de la presentación de Apple del pasado miércoles?
Sugerencia de presentación: What do you want from me – Monaco