Inicio Carrera Cómo pongo orden en mi vida, ejercicio práctico

Cómo pongo orden en mi vida, ejercicio práctico

Mucha gente con la que trabajo que me reconoce haber tocado fondo más de una vez. A muchos les sucede por el desorden de estos tiempos, la falta de trabajo y el miedo a la incertidumbre en general. A otros ya les sucedía desde hace tiempo, entras en una dinámica de negatividad pseudo-depresiva, en la que tienes apatía durante el día e insomnio por la noche.

Es algo muy frecuente. Más de lo que piensas. Pero la gran pregunta es:

“¿Y cómo salgo de esta dinámica?”.

No es fácil, requiere de mucha fuerza de voluntad. Pero se puede. En este artículo te voy a explicar un método muy sencillo que recomiendo a mucha gente.

CHAKANN ALERT: El objetivo primordial no es hacerlo perfecto, no es el resultado excelente. La idea es salir del pozo, ponerse en marcha, hacer cosas. Avanzar y automotivarse. El simple proceso de hacerlo te sacará poco a poco de esa negatividad en donde te encuentras y serás capaz de seguir al siguiente nivel. Y a partir de ahí a seguir luchando por el día a día (porque la vida no es fácil, es cada día currárselo).

5 pasos para poner orden en tu vida:

Paso 1 Define qué quieres

Estás mal; pero no todo el rato es así. Lo más habitual es que tengas momentos de lucidez o de ganas de hacer cosas. Sobre todo, por la noche, cuando no te apetece dormir, te vienen sueños e ideas incumplidos; pero te das cuenta que es tarde, no es el momento o físicamente no puedes (¿dónde voy a ir a las 4 de la mañana?). En esos momentos de ganas, de salir de la mierda, es cuando debes hacer un listado de las cosas que deseas hacer.

Sencillo, una lista de lo que te parezca, alocado, serio, es igual. Escribe. No importa qué, lo que queremos es poner cosas que te gustaría hacer, ya las filtraremos más adelante. Por ejemplo,

    • Tener un cuerpo 10
    • Dejar de fumar
    • Encontrar un buen trabajo
    • Ser feliz
    • Vivir en Tokio
    • Tener 1 millón de euros

Paso 2 Filtra esa lista y/o reescribirla a algo más manejable

Si la cosa ha ido bien, lo más probable es que tengas una mezcla de ideas locas, de planes que siempre quisiste hacer, sueños sin mucho donde sostenerse ahora mismo (pandemia, recursos, falta de autoestima…) y “propósitos de año nuevo” que siempre han estado ahí. Está bien, no importa mucho, esto es algo a largo plazo. Empezaremos por cosas sencillas y asequibles. No borres la lista, en un futuro querrás retomarla.

Entonces, elige cosas fáciles. Para empezar, recomiendo una lista pequeña, 3 por ejemplo.

    • Tener un cuerpo 10
    • Dejar de fumar
    • Encontrar un buen trabajo
    • Ser feliz
    • Vivir en Tokio
    • Tener 1 millón de euros

Y luego las traduces a algo más sencillo:

    • Quiero adelgazar
    • Fumar menos
    • Sentirme bien

Paso 3 Traducirlo en acciones

Ahora, con esas 3 cosas/sueños/objetivos, toca pensar un poco y pasarlo a una acción o actividad determinada. Para cada una plantéate, ¿qué podría hacer para llegar a conseguir eso? Y ahí le buscas “tú método”, si no se te ocurre, siempre puedes pedir ayuda a alguien (ojo con los cuñaos). Lo importante, además, es que sea objetivable. No valen cosas que no se puedan demostrar. Por ejemplo, siguiendo lo que teníamos:

    • Quiero adelgazar.
        • Caminar cada día x pasos
        • Comer cada día un plato con algo “verde”
        • Ir al gimnasio x veces por semana.
    • Fumar menos
        • X cigarros al día
        • Romper directamente un cigarro del paquete
    • Sentirme bien
        • Hacer 5 minutos de meditación al día
        • Leer mínimo 5 páginas al día
        • Charlar con alguien de sus cosas (interés por los demás)
        • Ver cada día una charla motivacional en YouTube

Lo que sea. Idealmente, debe ser una misma tarea que sea cada día. Lo que buscamos es crear un hábito fácil y que lo podamos repetir por rutina a diario, si lo hacemos puntualmente, va a perder fuerza. En el caso del gimnasio, recomiendo, aunque sea entrar y salir. Hábitos. El asunto es crear una rutina de “hechos conseguidos” y empezar por cosas asequibles.

Paso 4 Hacer un To Do List.

Esto ya está. Ahora tienes un plan, unas cosas que vas a hacer. Lo que toca seguidamente es revisar que lo cumples. ¿Cómo? Pondrás esas tareas en un papel/pizarra/documento electrónico algo que te permita ver qué has hecho hoy y qué vas a hacer mañana. Algo así como tu agenda semanal. Realmente seria como tus obligaciones mínimas para estar bien: cumplir estas tareas.

    • He caminado X pasos
    • He comido un plato con algo “verde”
    • He ido al gimnasio/ he hecho deporte
    • He fumado x cigarros
    • He leído 5 páginas de un libro
    • He hablado con un amigo sobre sus cosas
    • He visto un video nuevo sobre motivación

Pones cada tarea de lunes a domingo y cada día cuando haces algo, lo vas tachando. ¿Tachar mola, a que sí?

Lo bueno es irte a dormir y ver que has tachado todo lo que tocaba hoy. Y mola más todavía cuando ya llevas unos días y ves que está todo tachado en los días anteriores.

Paso 5 Mantenerlo durante 30 días.

Lo más difícil. Al fin y al cabo, no deja de ser un challenge como los que se están poniendo de moda. 30 días en los que harás siempre estas acciones. Lo importante en estas cosas es comprometerse durante bastante tiempo para que sea una rutina. La rutina está muy mal vista en general, pero lo que hace es darte estructura, poner orden en tu vida. Al final, hará que te sientas mejor. Te lo aseguro.

De nuevo, es importante conseguir cada día lo que haces; pero es tanto o más importante ver que vas avanzando, que le das menos vueltas a las cosas. Simplemente lo haces. Eso te motivará, aunque sean tareas muy tontas. Pero te hará sentirte bien porque verás claramente como no eres “improductivo” o que no eres “una mierda”, esas cosas que uno se dice cuando no está de bajón…

¿Y por qué 30? Muchos cursos y planes dicen 21 días; no encuentro la fuente, pero hace tiempo vi/leí/me dijeron (sorry) que era un estudio de esos que nunca se acabaron de validar y que se han repetido por copy-paste sin criterio. Aparentemente aquello de 21 días no contaba los fines de semana… Con lo que para crear un hábito son 29 no 21; pero da igual. Como siempre, haz lo que te funciona.

Yo lo he probado y en mi propia experiencia al llegar a 21 días sientes que ya has creado un hábito, aunque se queda como en el límite, no está del todo afianzado. Pues mejor mantenerlo más tiempo. ¿Que te va bien con 21? pues 21.

Estoy deseando saber cómo te va. ¡cuéntame!


Sugerencia de presentación: Incendios de Nieve – Love Of Lesbian
Google search engine
Artículo anteriorDecir «No sé» es un derecho humano. Dejemos de verlo como un pecado
Artículo siguiente5 cosas que empleados no soportan de su jefe
Consultor de estrategia empresarial y Mentor de artistas. He trabajado en entornos altamente cambiantes y competitivos en el mundo de los negocios, y he visto lo mejor y lo peor del ser humano. He comprobado que el cómo se hagan las cosas es tanto o más importante que el fin en sí mismo; y que el llamado éxito sólo se da gracias a la libertad de mente y espíritu. Fan de Bunbury y coleccionista de relojes.

¿Qué opinas? Hablemos.