El final del año se acerca rápidamente y tú solo puedes pensar en todas las cosas que tienes que hacer antes de las fiestas. Hay muchas exigencias relacionadas con estas fechas: hacer compras, cocinar, limpiar y recibir huéspedes, por nombrar algunas. A la vez que en el trabajo crece la presión por terminar todos los pendientes y cerrar proyectos antes de salir de vacaciones. Es el periodo más estresante del año.
A todo esto se suma que no solo son meses estresantes; suelen ser los menos productivos. Una combinación fatal para el estrés, en especial si eres alguien con tendencia a preocuparse.
Una parte de ti quiere alejarse de todo esto. Déjame decirte que no estás solo, muchas personas se sienten de la misma forma respecto a los últimos dos meses del año.
Pero no tiene por qué ser así. Sal de este artículo con 7 tácticas para superar la temporada más estresante del año y disfrutar de las fiestas.
1. Organiza tu tiempo y lo que harás con él
Estos meses pueden resultar abrumadores, hay mucho por hacer. El problema es que vamos aplazando cada tarea hasta que las fechas se vuelven inminentes, y entonces no queda más remedio que correr. ¿Resultado? Todo es estresante.
Pero tú puedes poner fin a esta carrera. ¿Cómo? Prepárate para comenzar con los preparativos con semanas de antelación. Así será más fácil gestionar tu tiempo en diciembre.
Una buena práctica es crear listas de las actividades y pendientes. Esto te ayudará a gestionar las tareas pendientes a lo largo de estos meses, y también facilitará la toma de decisiones relacionadas con los gastos propios de la temporada. Cuando se trata de dinero, también es útil tener un presupuesto y ceñirse a él.
También puedes fijar fechas límites para cada cosa en tu lista. Por ejemplo, proponte hacer las compras navideñas antes de que termine noviembre. De esta forma evitas el ajetreo y el bullicio de los negocios en diciembre.
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2. Sé realista
Olvídate de la perfección, en el periodo más estresante del año tendrás que lidiar con algunos fallos en tus planes: invitados que te cancelan, retrasos, familiares groseros, tareas de última hora, trabajos inesperados.
Lo cierto es que la ley de Murphy suele estar más presente que nunca a final de año. Así que acepta que no todo saldrá de acuerdo al plan, y eso está bien. No es un problema.
Enfócate en lo que importa, pasar tiempo con tu familia, disfrutar de los días libres, descansar y prepararte para comenzar el año que comienza de la mejor manera posible.
3. Aprovecha para divertirte y salir de la rutina
Una de las cosas positivas del fin de año es que nos ofrece muchas oportunidades diferentes para salir de la rutina y divertirnos. Y no hablo de pasar horas mirando reels en Instagram o series en Netflix, no.
Hablo de diversión real.
Sal a pasear por la ciudad, ve a conciertos, aprovecha los eventos de la temporada, disfruta de las decoraciones navideñas. Toma clases de baile, o practica algún deporte, escápate durante un fin de semana, saca los juegos de mesa, ve una buena peli en el cine.
La lista es larga y variada, solo debes animarte.
Incluso si al principio cuesta salir de casa, pronto te darás cuenta de que vale la pena dejar el teléfono y disfrutar de la vida. Además, te ayudará a aliviar el estrés.
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4. Evita los excesos
Divertirse está muy bien, es necesario y lo mereces, pero también es importante cuidarse de los excesos. Si te excedes en las comidas, puedes terminar afectando tu salud. Si te excedes en las compras, puede que te arrepientas. Demasiado alcohol puede llevar a malos momentos. Incluso la actividad social excesiva puede afectar la salud mental.
Los excesos en cualquier área solo aumentarán tu estrés, ya sea ahora o en enero cuando veas el estado de tu tarjeta de crédito o tu peso en la balanza. Diviértete, sí, pero no pierdas de vista los hábitos saludables que practicas habitualmente.
5. En el periodo más estresante del año, prioriza tu tiempo y energía
Demasiados compromisos en la temporada a menudo nos llevan a priorizar los deseos y necesidades de los demás. Este es un error grave y puede hacer que te sientas agotado.
Ponte a ti mismo en primer lugar. Medita, sal a caminar, nada, escucha música, cocina, haz lo que te haga sentir bien. Asegúrate de hacer cosas que te gusten, dormir lo suficiente y participa solo en las actividades sociales que tu propio bienestar resistan.
Ten en cuenta que para lograrlo será necesario decir que no muchas veces. Esta simple práctica puede reducir la carga de estrés de la temporada.
No aceptes los compromisos solo por complacer a otros o quedar bien. Invierte tu tiempo en actividades que te hagan feliz. Así conseguirás disfrutar más de las cosas positivas que estos meses tienen para ofrecer.
6. Transición al modo vacaciones
Si vas a tomarte unos días para viajar, entonces puedes hacer una transición. Apagar el ordenador en la oficina para salir corriendo al aeropuerto solo agregará más tensión a estos meses. Además, esa no es manera de comenzar unas vacaciones.
Reserva un par de días para hacer la transición del modo trabajo al modo vacaciones. En este sentido, prevé tiempo entre el último día en el trabajo y el día de partida de tu viaje.
No solo tendrás más holgura para solucionar cualquier imprevisto. Sino que podrás tomarte un momento para desconectar del estrés cotidiano y comenzar tus vacaciones en un estado mental más relajado.
7. Participa en alguna actividad de voluntariado
Puede parecer contradictorio ofrecerse como voluntario cuando hay tanto por hacer y la idea es deshacerse del estrés. Pero ayudar a otras personas puede tener enormes beneficios a tu salud mental y bienestar.
Ayudar a otros pone las cosas en perspectiva, y te hace reflexionar sobre tus prioridades. Además, la experiencia del voluntario siempre deja mucho más de lo que das.
El sentimiento de ayudar a los demás es una forma de recargarse de energía positiva e inspiración.
Llegar a los últimos meses del año es motivo de celebración y alegría. Pon en práctica esta lista de consejos y verás que es posible hacer el trabajo sin sacrificar el bienestar ni la diversión.