El deseo de emprender se ha vuelto cada vez mayor. Las personas muestran un creciente interés en construir sus propios negocios. A esto se suma la necesidad de generar nuevas fuentes de ingresos a fin de mantener o mejorar la calidad de vida. Así, por una razón u otra, se ha vuelto bastante común que las personas lleven un negocio propio, a la par que trabajan por cuenta ajena.
Esta situación tiene muchos matices que pueden variar de un caso a otro, y la gestión de las redes sociales sobre la faceta emprendedora o la monetización de la marca personal, es uno de los puntos de mayor controversia. Las empresas revisan las redes sociales de miembros actuales y potenciales de la organización. Un mal manejo de la información que se publica puede incluso derivar en la pérdida del empleo.
¿Por qué las empresas espían las redes sociales de sus empleados?
La vida que hace un empleado en internet puede impactar favorable o desfavorablemente la imagen de una empresa. Y en la era del internet la imagen corporativa se ha convertido en un activo intangible de mucho valor. Es por esto que las compañías se muestran cada vez más celosas sobre su imagen y la forma en que sus miembros inciden en ella, poniendo especial foco en las redes sociales.
Un intento por ejercer control sobre este aspecto son las políticas y códigos de etiqueta para la web que las compañías establecen para sus empleados. Con esto buscan alinear la imagen que transmiten sus empleados con la imagen corporativa que se desea proyectar.
En este sentido, según un estudio realizado por InfoJobs, Facebook e Instagram son las plataformas que más atención reciben por parte de los departamentos de recursos humanos. La naturaleza de estos portales hace que la información que allí publicamos sea de carácter público. La empresa no estaría, entonces, invadiendo nuestra privacidad, ni infringiendo ninguna ley.
Por tanto, bien sea que se usen solo con fines personales o como una vía de emprendimiento, es tarea de cada persona hacer un uso consciente y responsable de las redes, a fin de evitar cualquier repercusión negativa en su carrera profesional.
En los últimos años se han presentado varios casos donde una persona pierde su empleo por alguna publicación en las redes sociales. Las empresas suelen argumentar que lo publicado va contra alguna política establecida. Pero probablemente habría más benevolencia hacia el empleado, si las redes no tuvieran tanto impacto y relevancia en la opinión de las masas.
Una foto, un comentario, un video puede hacerse viral, y derivar en un rechazo generalizado hacia la compañía. Incluso si el contenido no se relaciona directamente con las actividades de la compañía, podría perjudicar la reputación de la empresa. En este tipo de situaciones, la organización prefiere cortar su vínculo con el empleado, a fin de proteger su imagen.
Ahora bien, ¿cómo podría incidir la marca personal de un empleado en la imagen de la compañía? La relevancia de las redes es innegable. Imaginemos por un momento que uno de los miembros de Greenpeace postea una foto de su negocio de venta de comida orgánica. Probablemente para la reconocida organización, esto estaría más que bien, el negocio de la persona está alineado a los valores y la imagen de la organización.
Pero ¿qué sucedería si el emprendimiento fuese de zapatos de piel de cocodrilo? ¿Se vería afectada la imagen de la organización? Sin duda alguna. Cualquier detractor podría aludir a este miembro y su negocio para cuestionar el trabajo de la organización.
Del mismo modo, la marca personal y las huellas comerciales que un empleado deja en las redes sociales, pueden impactar positiva o negativamente la imagen de la compañía para la cual trabaja. A fin de cuentas, todo empleado es un representante de la empresa que lo emplea.
Conflicto de intereses entre la marca personal y el empleo
Sucede que las ideas de emprendimiento se relacionan con aquello que sabemos hacer, nos apasiona, y disfrutamos hacer. Esto muchas veces lleva a que lo que se pretende desarrollar como emprendimiento se relacione con lo que se hace dentro de la empresa. En este sentido, es importante considerar la parte legal. Pues, si el emprendimiento en cuestión forma parte del mismo mercado de la empresa para la cual aún se labora, se podría estar ante un conflicto de interés.
Es importante considerar que a fin de evitar esto, el empleado no deberá interferir con los clientes de la compañía, ni podrá utilizar o replicar sus procedimientos de forma alguna.
Algunos consejos para evitar que las redes de tu marca afecten tu empleo
De todo lo anterior, se derivan algunos consejos claves para conseguir el equilibrio entre las redes personales de tu marca y tu empleo:
Asegúrate de conocer las políticas de la empresa
Así como, los límites impuestos en el documento de contratación, esto permite saber exactamente cuáles son los derechos, y límites sobre lo que se puede y lo que no se puede hacer al desarrollar una marca propia. El sentido común al momento de gestionar las redes también puede evitar muchos inconvenientes.
Respeta los límites de la propiedad intelectual
Si tu negocio personal, se centra en actividades relacionadas a la de tu empleador, conviene ir con cuidado. No publiques nada que pueda interpretarse como plagio. Tu marca debe tener su propia personalidad, y no ser una copia de la empresa para la que trabajas ni de ninguna otra.
No postees nada desde tu lugar de trabajo
Ni durante el horario de tu jornada laboral. Tampoco utilices ningún recurso de la empresa al llevar tu marca personal y sus redes. Además, conviene que cuides las fotos que subes. Estas no deben ser tomadas en tu lugar de trabajo. Tampoco debes salir en ellas con tu uniforme, carnet, ni nada que te asocie a la empresa para la cual laboras.
No hables mal de tu empleador.
Este es un consejo útil tanto si son tus redes personales como las de un emprendimiento. Evita quejarte de tu empleador, hablar mal de sus productos o hacer cualquier insinuación que perjudique la imagen de la compañía.
Estos simples consejos te ayudarán a llevar tu marca en redes sin afectar tu empleo. Aunque en última instancia se trata de sentido común, si al hacer una publicación, vienen a tu cabeza dudas sobre si puede poner en riesgo tu trabajo, entonces, lo mejor será dar un paso atrás, reevaluar y cambiar el enfoque.